Los poemas de este blog son del poeta Javier Villegas Fernández y tienen derechos reservados de autor.

sábado, 7 de abril de 2012

POEMAS DE "ANOCHÉCEME... AMANÉCEME"

Esta tarde

Esta tarde, imaginé tu cintura,
la intuí con textura de hierba,
con temperatura de espiga,
con ondulaciones de agua.
Esta tarde, te tatué en mi ventana,
mirándome, apeteciéndome,
sintiéndome en tu protuberancia de selva;
me alegre, mi alegría se pluralizó
en mis manos, como si fuese palomas.
Surgí de mí, se aceleraron mis latidos,
me enajené en tu imagen
con tiempo de mar y de luna,
con aroma de jardines y lluvia.

Esta tarde, sálvame de mí,
cobíjame en tu temperatura de fragua,
no huyas de mi ventana,
abre tus brazos, tus labios y llámame,
yo acudiré en el viento
para memorizar tu nombre,
para gritarte, por sobre los gritos,
fatigados por la sed y el hambre.
Esta tarde, debo llegar al centro de ti misma,
a tu esencia de mujer y hembra,
despertaré mi tacto y mi olfato,
me trasmutaré en un mar sin alfabeto,
para descubrir en tus labios, tu cuerpo,
el abecedario del amor
y la infinita luz donde te busco.
.
© Javier Villegas (Perú)
De: “Anochéceme, amanéceme” – Inédito
© Derechos reservados.

PARA ENCENDERTE SIEMRE...

Por qué este recuerdo,
me culpa a mí de no tenerte,
por qué este silencio,
te arde en mí y no te siento,
no calles, no huyas,
has crepitar tu cuerpo,
y penetra en mí
para encenderte siempre.


© Javier Villegas (Perú)
De: “Anochéceme, amanéceme” – Inédito
© Derechos reservados



OTRA VEZ LA NOCHE…

Otra vez la noche, no es la noche,
si tu cuerpo viene con jolgorio de viento,
si adivino tus ojos detrás de la puerta,
entonces deduzco que en el norte,
me nombras con la boca cerrada,
suspiras y me colocas en tus labios abiertos.
Otra vez la noche, no es la noche,
te agolpas en mí con tus raíces de escarcha,
zozobro anhelándote como un navegante,
divago al no tener sueño para soñarte,
pernoctando en las ramas de un sauce,
o en la luna encendida para proclamarte,
código del amor y de las esferas celestes.

Otra vez la noche, no es la noche,
mi corazón vibra si me oye nombrarte,
mis ojos se abren para no perderte,
tus ojos se cierran para contenerme.
Otra vez la noche, no es la noche
permanezco despierto para localizarte,
en el rumor de la lluvia, en mi respiración,
en mi terco silencio, en la vibraciones del eco;
sino duermo me alegro, me coloco en mi centro
y desde allí, a tu corazón me proyecto.

© Javier Villegas (Perú)
De: “Anochéceme, amanéceme” – Inédito
© Derechos reservados

CONTINUA COMO LA CANDELA

Mujer, por donde pasas
dejas caer tus luces,
las recojo para alumbrar mi pecho,
porque sin ti, la oscuridad
es una paloma dormida en lamento,
el latido de torna fúnebre
y grávido de pena, huye en el viento.
Arde siempre por donde viajan mis ojos,
vuela hacia mí como una mariposa,
desnúdate para verte completa,
como se ve a la luna
en el sueño de una gaviota,
salta de los espejos ferviente,
he bosquejado para ti,
caminos de aromas y horizontes.
.
Mujer, por donde pasas,
se inaugura una fiesta,
pueblas los espacios
con el fuego de tu cuerpo,
yo busco tu temperamento en el zodiaco,
equilibro en mis ojos, los dones de tus ojos,
desenredo tu cabello,
para diseminar tus secretos
y completamente develada,
habites en mí, alegre como la lluvia,
continua como la candela.

© Javier Villegas (Perú)
De: “Anochéceme, amanéceme” – Inédito
© Derechos reservados